viernes, 16 de enero de 2015

Resaca y manejo: todo lo que deberías saber y nadie te informó

¿Qué es la resaca alcohólica?


Es conocido el efecto negativo que tienen sustancias como drogas de abuso o el alcohol sobre la conducción de vehículos. Sin embargo, no está difundido en la comunidad lo que sucede al día siguiente de haber bebido alcohol en exceso. Precisamente, esto es lo que se define como resaca alcohólica, un cuadro que se presenta luego de un consumo excesivo de alcohol, cuando la alcoholemia alcanza valores cercanos a cero. Es decir, cuando las pruebas para detectar alcohol en sangre o en aire espirado dan negativas, pero permanecen aun los síntomas que dejó el paso del mismo.

¿Cómo afecta en la conducción de vehículos?


El hecho de conducir bajo el efecto de la resaca alcohólica disminuye de manera importante el estado de alerta y aumenta exponencialmente el riesgo de siniestros viales. Los conductores bajo los efectos de la resaca presentan disminución de la coordinación motora, que es la capacidad para usar los distintos músculos del cuerpo de manera armónica, y disminuye la velocidad de reacción es decir que se ve aumentado el tiempo que el conductor tarda en decidir si debe hacer una acción o no. Estos efectos son la consecuencia de las alteraciones fisiológicas que tienen lugar en este estado. Por ejemplo, deshidratación, disminución de glucosa en sangre y alteración de los electrolitos.

Tanto los síntomas experimentados como su intensidad pueden variar de persona a persona y en cada ocasión; dependen del tipo de bebida alcohólica consumida y  de la cantidad de alcohol ingerida. Más aún, diversas investigaciones coinciden en que la cantidad de tragos que una persona necesita tomar para padecer resaca es menor que la que ellos creen.

Las personas en resaca presentan una disminución en la calidad de conducción, dada por la fotofobia, que produce un mayor enceguecimiento ante estímulos luminosos, trastornos auditivos que pueden dificultar la percepción normal del ruido producido por el tránsito, así como transformar en molestos sonidos que normalmente no lo son (irritabilidad), los cuáles sumados al dolor de cabeza, nauseas y vómitos lo convierten en un cuadro que inhabilitaría la conducción.  Por otra parte, la disminución de la atención, en conjunto con la fatiga y somnolencia producida por la resaca son factores de riesgo determinantes en los siniestros viales.

Si bien estos síntomas y su correlato con el deterioro de la habilidad de conducir son subestimados por la población general o directamente se ignoran, recientemente se ha incrementado la preocupación tanto de los organismos gubernamentales como de la comunidad científica por este tema. De hecho, se han realizado trabajos de investigación para relacionar el estado de resaca y la habilidad para conducir. En un trabajo llevado a cabo en Los Países Bajos recientemente, se midió en voluntarios, en estado de resaca, la capacidad de conducir en línea recta sin superar una velocidad determinada. En el mismo se comprobó que aquellos conductores que se encontraban en resaca aumentaban significativamente el número de veces que se desviaban lateralmente, respecto a los que no habían bebido previamente. Paralelamente las personas en resaca manifestaron estar cansados, con problemas de concentración y somnolencia. Los resultados mencionados indican una relación directa entre los síntomas y el riesgo aumentado de sufrir siniestros viales.

¿Qué fija la legislación argentina al respecto? 

Citando la ley nacional de Lucha contra el Alcoholismo (Ley 24.788) en su artículo 17) afirma:  “Queda prohibido conducir con impedimentos físicos o psíquicos, sin la licencia especial correspondiente, habiendo consumido estupefacientes o medicamentos que disminuyan la aptitud para conducir…” entendiéndose que se consideran alterados los parámetros normales para una conducción segura cuando existe somnolencia, fatiga o alteración de la coordinación motora, la atención, la percepción sensorial o el juicio crítico. Estas condiciones se corresponden en gran medida con las alteraciones observadas en la resaca, por lo cual se estima que la mencionada Ley estaría prohibiendo conducir en este estado. 

Por otra parte la misma legislación prohíbe la existencia de concentración alguna de alcohol en sangre en conductores de vehículos destinados al transporte de pasajeros, de menores y de carga. Sin embargo no tiene en cuenta el consumo previo excesivo de alcohol, ya que aun con alcoholemia cero los síntomas de resaca se manifiestan.

Otras investigaciones realizadas recientemente compararon la velocidad de reacción y atención en un grupo con resaca (alcoholemia igual a cero) con respecto a otro grupo que había ingerido recientemente alcohol (alcoholemia igual 0.08%). No se observaron diferencias en el déficit de atención y la velocidad de reacción entre el grupo con alcohol en sangre y aquel que no lo tenía. Cabe aclarar que con una alcoholemia igual a 0.08% en Argentina estaría inhabilitado para conducir vehículos (esto corresponde a ingerir aproximadamente dos vasos de vino).
Si bien no cabe duda que los controles de alcoholemia que se realizan actualmente han contribuido en gran parte a la disminución de siniestros viales, aún no está difundido un método para medir el estado de resaca alcohólica. Cabe preguntarse entonces, hasta qué punto el “día después” en aquella persona que consumió cantidades excesivas de alcohol la noche precedente y luego conduce, puede también ser un factor crucial desencadenante de siniestros viales.

Fuente: http://link.springer.com/article/10.1007%2Fs00213-014-3474-9

miércoles, 24 de septiembre de 2014

La resaca alrededor del mundo.


La resaca es la misma para todos, tanto en Argentina como China, todos sufrimos los mismos síntomas. Es así también como todos buscamos alguna vez un remedio mágico que nos saque o nos evite este padecimiento.
Nos imaginamos que como cada país tiene su propia cultura y creencia, también iba a haber distintas “curas” de la resaca alrededor del mundo. Entonces buscamos como es que cada región lidia con algo que parece ser más común de lo normal y afecta a todas las edades. Nosotros hoy sabemos que no hay una cura efectiva para esto, pero las creencias son creencias y en muchas partes del mundo se practican.
Y acá te contamos como hacen para sobrevivir distintos países al "día después"..

Japón.
Después de una noche de mucha bebida, los japoneses recurren a un tipo de ciruelas ácidas y secas que ellos llaman Umeboshi, encurtido de ume (es una variedad de ciruela japonesa). El Umeboshi se hace secando ume, salándolo en barriles y poniendo un peso encima para exprimirle el jugo. Y a veces para diluir la amargura las empapan en té verde.
Alemania.
Los alemanes tienen palabras para todo, incluso para el desayuno post-resaca: katerfrühstück. Se trata de un arenque en escabeche envueltos en pepinos y cebollas. Y a veces lo acompañan con cerveza!
Polonia.
Los polacos comen pepinos agrios en un vaso de salmuera o chucrut, para aliviar el bajón de la mañana.
Rusia.
Los rusos creen que la mejor manera de eliminar los síntomas de la saturacion de vodka de la noche anterior es con sesiones de sauna. Otra cura es el Kvass, una bebida fermentada ligeramente alcohólica, se elabora con harina de centeno y malta, un poco de pan de centeno y manzanas, y a esta mezcla se la deja fermentar en agua.
Mongolia.
Los mongoles, valientemente, tragan un vaso de ojos de oveja en vinagre, mezclados con jugo de tomate para ahuyentar el bajón del día después. Quizás esto es con la idea de inducir el vomito, quien sabe..
México, Turquía y Rumanía.
Estos países cuentan con una sopa de mondongo para aliviar el dolor de la resaca. En Turquia, se conoce con el nombre de Iskembe Corbasi, y tiene como base limon y vinagre picante. La versión Rumana es Ciorba de Bruta, un plato salado de vegetales de raíz. En México se llama Menudo y esta hecho con ajo y cebolla. Hay otra cura mexicana llamada "vuelta a la vida", que es un cóctel de mariscos mezclado con jugo de tomate y pico de gallo.
Escocia.
Los escoceses usan una mezcla tradicional de suero de leche, harina de maíz, sal y pimienta a la que llaman The Highland Fling. Pero hoy en día los escoceses juran por Irn-Bru, una bebida carbonada de naranja, para revivirlos después de una gran noche.
Gran Bretaña.
Los británicos absorben las pintas con un sándwich de tocino. Están tratando de tomar un enfoque científico: en 2009, un estudio de la universidad de Newcastle encontró que la combinación de tocino y pan realmente puede curar una resaca proporcionando aminoácidos.
Perú.
Leche de tigre es el escabeche sobrante del ceviche. La combinación de jugo de limón, jugo de lima, caldo de pescado, desechos de pescado, ajo y jengibre se usa para aliviar el dolor punzante de cabeza de la resaca. Aunque también lo usan como un afrodisíaco.
Sicilia.
El pene seco de un toro es, al parecer, la merienda tradicional de elección para la resaca por los sicilianos.
Vietnam.
Aunque el comercio de cuernos de rinoceronte es ilegal, el cuerno de rinoceronte empapado en agua caliente se ha considerado un remedio para, no sólo las resacas sino también el cáncer.
Filipinas.
Los huevos han sido pensados para aliviar el dolor del día siguiente de beber en exceso, pero se aconseja comer Balut (que en filipino y malayo significa "envuelto"), es un huevo de pato ya fertilizado con su embrión dentro que se cuece al igual que un huevo cocido (si es que pueden soportar tragar un pájaro parcialmente formado con pico y todo).

miércoles, 17 de septiembre de 2014

En busca de una cura para la resaca

Domingo. 11 AM. Me despierto con un mensaje de mi amigo que dice:
 “Tengo resaca. Que hago?” 
Cuatro palabras, toda una responsabilidad.

A todos alguna vez nos ha pasado de despertarnos, mirar el techo, y sin entender demasiado donde estamos, darnos cuenta de golpe que tenemos resaca. En esa posición mientras miramos el techos, se nos acercan uno por uno los síntomas: nos duele la cabeza, la luz nos parte la retina, el olor a comida que viene de la cocina nos da nauseas, se nos mueve todo. RESACA. La peor resaca, seguramente juremos nunca volver a tomar, pero en el fondo sabemos que es mentira.
Seguido a eso buscamos como escapar del escarmiento que nos ha caído encima por tomar alcohol y recurrimos a nuestra fuente ya sea: receta ancestral familiar, amigo médico (si investiga el tema mejor), o sino vamos ahí donde todos terminamos, en EL que todo lo sabe, EL que tiene todas las respuestas, EL que siempre nos salva: Google.

Un científico holandés, JC Verster, seguramente luego de un día de resaca, decidió investigar si era el único que googleaba el tema y cuando lo hacían. Descubrió algo interesante, las búsquedas en internet sobre la cura para la resaca presentan una periodicidad con picos que coinciden con los fines de semana, (es decir si graficamos los dias del mes en función de las búsquedas, vamos a ver que aumentan los sábados y domingos) y picos más altos todavía, luego de los días festivos (año nuevo).



Conclusión: todos buscamos y seguiremos buscando lo mismo. Cada uno tendrá sus formas, pero el fin de semana, después de haber tomado alcohol, lo único que nos importa es buscar una forma de sentirnos mejor. Lo que me lleva a dos preguntas:

-          Existe la cura para la resaca?
-          Acaso no aprendemos nada?

La respuesta a la primera es NO, no existe una cura para la resaca, aunque nuestro amigo nos asegure que prepara un brebaje milagroso seguramente esté más cerca del placebo que de la efectividad. Existen sí una serie de elementos para disminuirla pero será tema de otra discusión, así la “cura” sigue siendo un terreno incierto, con investigadores a favor del desarrollo de un fármaco anti-resaca, e investigadores en contra argumentando dilemas éticos.

En cuanto a si aprendemos o no, claramente NO, así mientras nos dura la resaca aseguramos no volver a beber.. (tanto), la realidad nos muestra que no aprendemos de nuestros errores, y que probablemente el fin de semana próximo nos encuentre googleando una cura que sea mas eficiente que la de la semana pasada.


Fuente: http://www.eurekaselect.com/96710/article

domingo, 31 de agosto de 2014

¿Una buena noticia acerca de la resaca?

A partir de encuestas realizadas en Dinamarca a más de 50.000 personas, acerca de sus hábitos de beber, se ha llegado a interesantes conclusiones teniendo en cuenta:
Frecuencia de ingesta de alcohol por semana o por mes,
-  Cantidad de tragos ingeridos,
-  Ingesta de alcohol en las comidas,
-  Síntomas que padecían luego de cada episodio (dolor de cabeza, mareos, náuseas, vómitos, sed, cansancio),
-  Otros factores (tabaquismo).
Por un lado, se vio que los jóvenes de entre 18 y 29 años de edad son los que más consumen alcohol en exceso. Pero a la par les siguen los adultos mayores de 50 años, que a diferencia de los jóvenes,  tienen un mayor consumo durante las comidas. Este hábito tan particular de los adultos mayores tiene sus ventajas y desventajas, ya que se observó que los que consumen alcohol en todas las comidas tienen menor probabilidad de padecer resaca que los que lo hacen sólo en algunas.
Por otro lado, tanto hombres como mujeres reportaron tener menos síntomas de resaca con el incremento de la edad. Entonces, si se comparan los datos obtenidos en estas encuestas entre los diferentes grupos de edad, se ve que en los jóvenes hay mayor probabilidad de padecer resaca, y que esta probabilidad disminuye notablemente con la edad. En términos matemáticos se generaría una relación inversamente proporcional, es decir que cuando aumenta la edad disminuye la probabilidad de sufrir una resaca.
Otro dato interesante que se obtuvo de las encuestas fue que tanto los fumadores como los ex fumadores tienen mayor probabilidad de padecer resacas más severas (más síntomas o síntomas más fuertes) que los que nunca han fumado.
Finalmente, con respecto a  la frecuencia de ingesta, se observó que los jóvenes de 20 y 30 años que tomaban cantidades moderadas de alcohol tendrían menos probabilidad de tener resaca que los que toman en cantidades más abundantes, pero tanto a los 40 como a los 50 años las probabilidades de sufrirla serían similares independientemente de las cantidades de alcohol ingeridas semanalmente (nuevamente la edad juega un rol importante).
Quizás les parezca raro confiar en conclusiones hechas a partir de un estudio basado en encuestas (que son totalmente subjetivas) pero este corre con varias ventajas, como por ejemplo la gran cantidad de personas encuestadas, la gran brecha de edad analizada, el estudio de los hábitos de beber (no sólo los síntomas de la resaca) y el control estadístico aplicado para la evaluación de los datos.


Pareciera entonces que nos vamos acercando a la idea de que algún día podríamos no padecer de la comúnmente llamada "Hangover" o resaca aunque para eso tengamos que esperar... 



Lucia Frankon

Seminarios

Una de las prácticas que adquirimos en este ultimo tiempo en el laboratorio es armar seminarios internos sobre la resaca, las bebidas energizantes, alcohol, entre otros temas.
¿Y porqué lo hacemos? Simplemente para mantenernos todo el tiempo actualizados sobre los temas que más nos interesan.
Entonces se nos ocurrió que cada seminario sea resumido para poder compartirlo acá con ustedes, y que ustedes no solamente puedan estar actualizados, sino que además puedan seguir nuestro trabajo día a día en el laboratorio.
Así que a través de esta breve nota doy comienzo a un tópico que se va a ir rellenando todos los viernes con datos de actualización.
Al final de cada resumen podremos el nombre de quien hizo el seminario y escribió dicho resumen, que básicamente somos nosotros, los que formamos parte del laboratorio y así nos van conociendo uno por uno.

domingo, 17 de agosto de 2014

Vamos de paseo

La resaca es ese estado de displacer inmenso que sentimos luego de una noche en la que bebimos más de lo que debíamos. Los síntomas que vienen incluidos son variados y entre ellos se incluyen: dolor de cabeza, nauseas, vómitos, mareos, fotosensibilidad, sed, pero con la particularidad que el alcohol en sangre es cero. Quizá en este estado a algún iluminado se le ocurra que una solución sería salir a pasear con el auto, tomar aire fresco y despejar la cabeza. Malas noticias, manejar con resaca es peligroso.

Diversas investigaciones a lo largo del mundo nos cuentan que los días lunes aumentan tanto los accidentes viales como los laborales. ¿Podrían estos deberse a la resaca después de un fin de semana agitado? O simplemente será que el hecho de descansar el fin de semana nos convierte en seres menos cuidadosos, torpes, propensos a accidentarnos.

Con esta información, en nuestro laboratorio decidimos probar si realmente existe una pérdida de la coordinación motora el día después de una noche etílica. Para comprobarlo lo hicimos, como no podía ser de otra manera, con ratones (ratones blanquitos, de laboratorio, con bigotes largos y ojos rojos). Les inyectamos alcohol y, cuando ya estaban en resaca, les hicimos hacer un par de pruebas.

Las pruebas, lejos de lo que la mayoría piensa que sucede en un laboratorio, son bastante simples. Tanto que cualquiera en su casa puede ingeniárselas para hacerlo (siempre y cuando tenga los ratones, claramente). Una de las que más utilizamos se llama “cuerda tirante”, así como su nombre lo indica consta de una cuerda que esta tirante entre dos soportes, situada a una determinada distancia del suelo. Cuando comienza la prueba, se coloca al ratón en la cuerda y se cronometra cuánto tarda en llegar al otro lado, o en caerse. Así, con un par de ratones, una cuerda y un reloj podemos evaluar si un ratón coordina más o menos, según si se cae rápido o cuánto tarda en completar su camino.

Los resultados que vimos fueron claros: la resaca disminuye la coordinación motora. ¿Qué significa eso?  Que nos cuesta más hacer tareas complejas, si queremos cortar un circulo con tijera, se va a parecer más a un cuadrado probablemente. Si queremos comer chicle y atarnos los cordones, seguramente terminemos con el chicle atragantado. Si queremos manejar, coordinar los pedales, el volante y los cambios se nos va a complicar. Volviendo a los ratones, todos los que estaban con resaca se desempeñaron mal en las tareas, y lo más notorio de todo fue que este problema se extendió durante aproximadamente 12 horas luego de haber comenzado la resaca. Si sacamos la calculadora y sabemos que la resaca empieza cuando no hay mas alcohol en la sangre, eso son 6 hs después del último trago, y el déficit en la coordinación dura 12 horas después del comienzo de la resaca, eso nos da un total de 18hs. Entonces si nuestro último trago fue a las 6AM, estaríamos con resaca (e incapacitados para manejar y/o realizar cualquier tarea que requiera coordinación) por lo menos hasta las 24hs de ese día.


Con estos resultados podemos concluir que otro punto que debemos tener en cuenta el día después de una noche de alcohol es que la resaca disminuye la coordinación y aumenta el riesgo de accidentes. Sabiendo esto, la famosa frase “si bebió alcohol no conduzca” deberíamos convertirla en “si tomo alcohol no conduzca por 24hs.

Fuente: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0166432813001782

sábado, 16 de agosto de 2014

El Lab

Comunicar lo que uno hace resulta fundamental, principalmente cuando lo que se hace (o intenta hacer) es ciencia. De qué le sirve al mundo un grupo de locos encerrados en un cubículo de 2x2m comunicandose en idioma foráneo, con palabras extrañas y de formas poco usuales con gente tan loca como los primeros que quiza se encuentren a miles de kilómetros de distancia.

La ciencia tiene que dejar de ser algo lejano y entendible por un pequeño numero de personas, tiene que convertirse en algo apto para todo público, algo que no aburra y principalmente algo que se entienda. Tiene que dejar de debatirse en anfiteatros y pasar a hablarse en el bar, en el supermercado, y durante la cena.

Con todo esto nuestro objetivo es claro: COMUNICAR. Pero COMUNICAR qué?

Somos un grupo que trabaja investigando resaca alcohólica, un tema bien conocido por todos, pero al mismo muy poco estudiado y menos entendido aún. Del que recien en los ultimos años se ha comenzado a comprender sus riesgos. Así nuestra tarea será contar  las cosas que descubrimos, las que leemos, las que hacemos. Intentaremos responder preguntas que alguna vez todos nos hicimos: ¿qué es la resaca?, ¿cuánto tengo que tomar para no tener resaca?, ¿qué puedo hacer para que se me vaya?, ¿por qué vuelvo a tomar alcohol incluso después de la peor resaca de mi vida?

Esperamos entonces generar todas las dudas e inquietudes que nos planteamos nosotros día a día. E intentar delucidar un tema que Platón lo deja plasmado en su dualidad de la siguiente forma:

".. Mi experiencia de médico me dicta que el exceso del vino es muy malo para el hombre. Evitaré este exceso cuanto pueda y jamas lo recomendaré a los demas, sobre todo al día siguiente, todavía con resaca.. "